
Laura Fryer, ex ejecutiva de Xbox y una figura clave en el desarrollo de la consola original de Microsoft, no ha ocultado su decepción ante el rumbo que ha tomado la marca.
Con décadas de experiencia a sus espaldas y habiendo sido productora ejecutiva de los primeros Gears of War, Fryer publicó un video titulado "El futuro de Xbox", donde analizó con franqueza la estrategia actual de Microsoft y la cuestionable viabilidad del hardware Xbox, tras el anuncio de la consola portátil ROG Ally, fabricada por ASUS.
Para Fryer, Xbox ha perdido su identidad. Según afirma, la consola portátil no tiene una propuesta de valor clara. Basada en una versión ligera de Windows, la ROG Ally no ofrece nada realmente nuevo ni exclusivo. A su juicio, no hay razón para adquirirla, ya que los juegos de Xbox se han convertido en multiplataforma gracias a Game Pass y Xbox Anywhere. “¿Por qué compraría este dispositivo si puedo jugar lo mismo en PC, PS5 o Switch?”, se pregunta.
Además, critica duramente la actual incapacidad de Xbox para lanzar juegos de alto impacto en tiempos razonables. Títulos como State of Decay 3, Perfect Dark o Fable llevan años en desarrollo sin avances significativos. Según Fryer, esto refleja una pérdida de la cultura de producción ágil que alguna vez caracterizó a Xbox. "No tienen ni el personal ni los procesos para lanzar grandes títulos como antes", lamenta.
Pero su crítica no termina ahí. Desde su perspectiva, Xbox está en una retirada progresiva del negocio del hardware, apostando todo a Game Pass. Aunque Microsoft anunció una colaboración con AMD para desarrollar nuevos dispositivos de próxima generación, Fryer cree que el mensaje es claro: la era del hardware Xbox podría estar acercándose a su fin.
El sentimiento es compartido por otras figuras clave del pasado de la compañía. Mike Ybarra, ex vicepresidente de Xbox y ex líder de Blizzard, también manifestó su frustración en X (Twitter), asegurando que “Xbox está confundida sobre quién es y qué debería ser”. En respuesta a un seguidor que defendía la plataforma, Ybarra fue tajante: “Xbox es una consola de videojuegos. Esa es la identidad. Punto”.
En su momento más introspectivo, Fryer reconoció que le duele ver cómo se desvanece la marca a la que ayudó a dar vida. Y con una pregunta flotando en el aire, deja la inquietud: ¿Qué queda de Xbox cuando ya no queda consola?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario